Coovicen compartió su experiencia asociativa en producción de vinos con nuevas empresas de Ñuble
Autor: Indap
Ñuble
Una jornada de trabajo en la comuna de Quillón encabezaron la directora de INDAP Ñuble, Tatiana Merino Coria, y el seremi de Agricultura, Fernando Bórquez, quienes junto a integrantes de Viñedos de Quinchamalí y Cubas de Ninhue visitaron la planta de la Cooperativa Agrícola y Vitivinícola Cerro Negro (Coovicen) para conocer su experiencia en la producción y comercialización de vinos del Valle del Itata.
La actividad fue organizada por INDAP en conjunto con Coovicen, con la finalidad de mostrar las ventajas del trabajo asociativo a los pequeños productores de los dos nuevos centros de acopio que se instalarán en la Región de Ñuble.
Juan Carlos Lagos, vicepresidente de Coovicen, destacó que la jornada permitió traspasar en forma eficaz el conocimiento que han adquirido desde que inauguraron su planta de vinificación, en junio de 2017. “Le entregamos información a estos nuevos poderes compradores del Valle del Itata, que recién están comenzando con sus centros de acopio. Como cooperativa les explicamos en qué consiste el proceso y cómo lo llevamos a cabo. Somos unos convencidos de que la solución a los problemas de la pequeña vitivinicultura del Valle del Itata se encuentra en el largo plazo y que por esa razón debemos trabajar para proyectarnos a 10, 15 ó 20 años”.
El seremi Fernando Bórquez, por su parte, resaltó las ventajas de la asociatividad para conseguir mayor volumen y mejores precios de comercialización. “Estamos avanzando en algo que hemos promovido durante mucho tiempo que es la asociatividad, política que impulsa nuestro ministro Antonio Walker y que cuenta con el apoyo del Presidente Piñera. Hoy nuestros agricultores se están juntando bajo este concepto, entendiéndolo como la única forma de enfrentar las fluctuaciones del mercado. En definitiva, hoy comenzamos a cristalizar las bases de lo que será la conformación de nuestra gran cooperativa de vinos del Valle del Itata, similar a Colun”.
La directora de INDAP Ñuble rescató el espíritu de unidad que se dio en la actividad, ocasión en que los productores compartieron sus experiencias y analizaron estrategias para enfrentar en conjunto la difícil situación actual de la industria del vino en la región. “No podemos desconocer que estamos pasando por momentos complicados, pero acá hemos podido presenciar un gran espíritu de unidad entre los agricultores. Ellos están muy conscientes de que la única forma de hacer frente a este escenario es uniendo fuerzas y visualizando el futuro en conjunto. Eso era precisamente lo que pretendíamos con esta visita”.
Gloria Oyarzún, representante de Viñedos de Quinchamalí, contó sus motivaciones para visitar la Cooperativa Coovicen: “Quisimos venir para conocer in situ cómo se gestó el centro de acopio más grande de Ñuble. Hoy, gracias al apoyo de nuestras autoridades, estamos creando nuestro propio centro de acopio, por lo que conocer el funcionamiento de Coovicen era clave para definir nuestros futuros pasos. Nosotros creemos que la asociatividad es el único camino y la clave para que los viñateros del Valle del Itata logremos salir adelante”.