Hitos 2025 del Plan Caprino en la Región de Coquimbo: sustentabilidad y más alternativas en infraestructura

Una de las iniciativas más emblemáticas que ejecuta INDAP en la Región de Coquimbo es el Programa de Fortalecimiento a la Producción y Comercialización Sustentable del Rubro Caprino Lechero (Plan Caprino), una iniciativa estratégica de adaptación al cambio climático y a la escasez hídrica, y que busca la viabilidad económica y social de la capricultura lechera campesina en un territorio altamente vulnerable.

Durante este 2025, el servicio dependiente del Ministerio de Agricultura se desplegó por diversos puntos de la ruralidad de las provincias de Elqui, Limarí y Choapa para atender a los 184 usuarios y usuarias participantes. Su metodología tiene un enfoque secuencial y participativo que organiza a los productores en Unidades Operativas (UO) territoriales, elabora Planes de Desarrollo Predial a tres años (con planes anuales de asesoría técnica e incentivos) y entrega componentes articulados de desarrollo de capacidades (asesorías y capacitaciones) e incentivos prediales.

El Plan Caprino se ejecuta exclusivamente en las regiones de Coquimbo y Atacama, e impulsa la transición desde sistemas extensivos —con alta presión sobre praderas naturales— hacia esquemas de semiestabulación o estabulación, reduciendo así la dependencia del forraje natural altamente afectado por la sequía. 

Inversiones de primer nivel

Entre los criterios para evaluar las inversiones está la priorización de proyectos que incorporen la eficiencia en el uso del agua, manejo de suelos, sombra e infraestructura de manejo y alimentación, entre otros. Además, el enfoque técnico se apoya en la intensificación sostenible basada en forrajes cultivados, alternativas forrajeras adaptadas al secano mediterráneo y balances forrajeros, reduciendo la sobrecarga de praderas degradadas y mejorando la eficiencia en la conversión de alimento en leche.

Catherine Navarrete es una de las participantes. Realiza su labor en la localidad de Tambillos, comuna de Coquimbo, y destaca los principales resultados que ha visto: “Tenemos cabras de alta productividad, porque criamos estabulado. Son 50 cabezas de ganado y somos de la idea de tener calidad más que cantidad. Obtuvimos nuestros primeros corrales mejorados, donde nuestras cabras van a estar en un refugio mejor. Así tenemos un manejo más automatizado del ganado. También mejoramos la genética de nuestras cabras, con la inseminación artificial a través de la Universidad de Chile, y hemos recibido asesoría especializada. Estamos muy contentos”. 

Claudio Castro, de la localidad de Los Nogales, comuna de Ovalle, señala que “para mí ha sido espectacular, por las inversiones que he recibido, como la mejora y ampliación de un galpón. Está por terminarse su construcción y será un cambio notorio para lotear los animales y así racionar y hacer más dirigida la alimentación, en el sentido de que puedo hacer una específica para las que estén en mantención, otra para las que estén en producción y otra para las que estén en gestación”.

Los principales hitos en este 2025 del Plan Caprino se enmarcan en asesoría técnica para todos sus participantes; asesoría especializada para 22 productores y productoras en manejo reproductivo y sanitario, entre otros; e inversiones por un total superior a $300 millones. A ello se suma la ejecución del convenio con la Universidad de Chile, a través del cual se ha capacitado a 103 usuarios y usuarias y se ha desarrollado el programa de inseminación para 257 animales, mejorando la genética con las razas Alpino Americano y Alpino Francés.

El delegado presidencial regional, Galo Luna, afirma que hoy “la Agricultura Familiar Campesina e Indígena realiza su labor en un contexto marcado por el cambio climático y la escasez hídrica. Esto nos lleva a que como Gobierno del Presidente Boric enfoquemos los programas y los recursos en mitigar los efectos de ambas condiciones. Es ahí donde el Plan Caprino surge como una potente herramienta, ya que brinda apoyos acordes a las condiciones particulares de sus 184 participantes, en donde prima la ejecución de inversiones ligadas a sostenibilidad, resiliencia y sustentabilidad productiva”.

Sobre esta labor, el director regional de INDAP, Víctor Illanes, dice que “la evaluación es positiva, sobre todo porque llevamos a cabo el mandato de nuestro Presidente Gabriel Boric, en el sentido de ayudar al mundo rural para que salga adelante y consolide sus procesos productivos y que así sus habitantes tengan mejor calidad de vida. Además, reforzamos uno de los pilares fundamentales que estamos trabajando, como es el de la sostenibilidad”. Agrega que “queremos que en el corto o mediano plazo podamos tener un grupo de productores de queso de cabra, de leche de cabra, de yogur o de manjar, que puedan colocar estos productos en los principales mercados de la región, del país y, por qué no decirlo, en algún momento a nivel internacional”.

Por su parte, el seremi de Agricultura, Christian Álvarez, enfatiza que “el Plan Caprino incorpora en su ejecución los conceptos de sostenibilidad, resiliencia y sustentabilidad. Esto es muy significativo, porque vamos avanzando a que las y los productores se adapten de la mejor forma posible a las nuevas condiciones climáticas. Igualmente, es importante destacar que todo este trabajo está llevando a que los participantes tengan producciones gourmet, altamente apetecidas”.

Durante este 2025, INDAP ha realizado mediante el Plan Caprino las siguientes inversiones: manga de ordeña para ganado, galpón o corral para animales, bodega de almacenaje, sala quesera o de ordeña, sistema fotovoltaico, equipos de ordeña móvil y fijos y tinas de pasteurización.